La Jutia

MonteriasRiquelme

 
  Fecha: 16-11-2019
  Finca: LA JUTIA
  Provincia: AB
  Organización:   Monterías Riquelme
  Nivel:
  Calidad: 9o 7p 17b
   
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Uno sueña con cazar fincas emblemáticas, premiadas, con historia y con esencia montera, y donde la gestión por parte del administrador y de la propiedad es sublime.

Y eso fue exactamente la Jutia UN SUEÑO HECHO REALIDAD…

Os ponemos en situación… 

La mañana despertaba con aroma a “Montero de Alpotreque”. Amanecía fría, con la Sierra de las Cabras nevada casi por completo, lo que anunciaba una montería dura y con sabor a antaño, con una esencia castiza que el viento del norte nos traía y que nos recordaba a monteros que desde el cielo con seguridad siguen jugando lances a grandes macarenos… ¡Va por ellos!.

Poco a poco van llegando los monteros al hotel de la finca, donde en su salón aguardaba Jesus Riquelme con Gabriel Ruiz Garcia, administrador de la finca.

Para que nada fallara parte del equipo de campo de Riquelme ya estaba en la finca con todo preparado. Jose Maria Martin Gonzalez y Jesús Lopez, junto a nuestro Taxidermista Antonio Ranchal Pedrajas, de taxidermia Sierra Morena, ultiman detalles y preparan el taco de productos ibéricos para los monteros.

Un sorteo rápido haciendo hincapié, como siempre, en la seguridad, lo más importante sin duda en una montería.

Se sortean las 15 posturas, las cuales se dirigen con sus secretarios al lugar donde la diosa fortuna les situaría en este ilusionante día.

El nerviosismo era palpable en los monteros. Ni un solo disparo antes de la suelta. No era el caso de esas típicas monterías de 100 disparos antes de soltar, ni por asomo. Las rehalas entraban en el monte guiadas por Jesús Riquelme, circunstancia que le ponía el corazón en la boca. Pero en cuestión de un minuto todo cambió…la Jutia no defraudaría a nadie. 

Un Riquelme emocionado, tembloroso, y con un nudo en la garganta ordenaba la suelta… era el momento de cumplir un sueño.

La emisora sonaba en cada una de las rehalas, la orden era clara…, es el momento… “Señores que sea lo que Dios quiera” abrid los portones y disfrutad..

Y no dio tiempo a dar un solo paso cuando la nieve del monte empezaba a resquebrajarse… Una gran pelota de venados, con algunos homologables, llegaban al puesto número 2, donde cumplieron y donde el montero levantó el rifle… y acertó… pues le entró a lo lejos lo que parecía el venado de su vida. El secretario, el amigo Pelino, no tenía dudas” es un orazo”, un venado con 20 puntas grueso, abierto y muy alto, que el montero no dudó en tirar, pero que lo que pasa en estos casos, cosa que reconoció el amigo Juan, que –solo veía venado y no lo he apuntado siquiera… y se fue de rositas… 

El mismo venado cumplía a la vez que las rehalas en el puesto número 1 de Andrés, que a apenas 50 metros y casi parado, no acertó a abatirlo. Los podenqueros no podían creer lo que estaban viendo. Las balas no daban ni cerca, y no por mal tirador, ya que jugó un lance justo antes a un jabalí con una boca de infarto y que se ha metido en metal alto, en un lance a tenazón. 

El venado se fue sano y salvo y se encamó al lado de los coches de las rehalas hasta el final de la montería, y para asombro de todos se paseaba tranquilo una vez salían los coches de la mancha.

El puesto 1 y 2 hicieron el cupo abatiendo finalmente 1 venado cada uno de muy buen porte, que con seguridad tocarán el metal, y abatiendo cada uno dos bocas de las que dan miedo mirar.

El puesto número 3 se dejó libre en beneficio del 4, ocupado por Don Carlos Buitrago , quien tuvo el gesto de honor de la montería, pues hizo lo que tenía que hacer y como tenía que hacerlo tras jugar lances a un precioso venado y a dos jabalíes. Riquelme, Antonio y Hortelano cantaban un jabalí como un oso al puesto, con una gran boca. Este señor se preparaba para jugar el lance cuando el jabalí cambia de pronto la dirección buscando la suelta, y aunque en principio no había riesgo para nadie, dando lecciones de buen hacer en el puesto levantó el rifle ante la cercanía de los perreros, gesto de Gran montero y lección para todos, recibiendo la enhorabuena por parte de todos los allí presente y especialmente de Jesus Riquelme por el lance “NO” ejecutado, y a través de la emisora de Antonio Chopera y Ernesto, que fueron a felicitar al montero, se le trasladó la felicitación por su gesto de gran cazador. El monte se lo devolvió con un gran macareno con solo una navaja en un precioso lance grabado por “Bolo” y ejecutado a la perfección para completar el cupo.

En el nº 5 Alejandro, recién producida la suelta, le entra un venado grandísimo con grandes palmas al que solo puede jugar el lance a relampagazos. Poco después se hacía con uno de los grandes macarenos de la jornada que obtendrá un metal alto con seguridad. Pero no quedó ahí la cosa. No paraban de cumplir animales en el puesto logrando hacerse con un precioso venado de 16 puntas, muy simétrico y que habrá que medir,  completando el cupo con otros dos bonitos jabalíes y dejando pinchada una cochina de  buen porte.

En el 6 Cristóbal Molina poco tardó en hacer el cupo y sobrepasarlo con facilidad. Cerró su puesto al poco de ponerse y no paraban de cumplir reses una y otra vez por el precioso testero que le fue asignado en sorteo, cobrando alguno de los trofeos de la jornada.

En el nº 7 el amigo José Atienza hacía el puesto de la montería doblando el cupo y con las cámaras de Rubén Del Sol de testigo. Abatió 2 venados, 1 de ellos de alrededor de 200 puntos y otro que con seguridad se meterá en metal también, dio una lección de lances y de saber montero, y reconoció personalmente al organizador el monterión vivido. Todo lo que abatió este señor era de calidad y se llevará un buen manojo de medallas para casa en un puestazo bonito y complicado, que cualquier otro montero hubiese desaprovechado pero él supo sacarle rendimiento al máximo arrebatándole 2 venados y 7 jabalíes. ¡Ahí es nada!. Enhorabuena y gracias Amigo.

En el 8, un puesto difícil de precioso testero, Isidoro muy bien acompañado por su esposa y por su hijo, que siguiendo los pasos de su padre se está haciendo un montero de categoría, consiguió hacerse con un gran venado, pinchando otro de gran porte que se cobraría al día siguiente. Además jugó una infinidad de lances a jabalíes consiguiendo un precioso cupo.

En el  nº 9 el amigo Antonio Tutor y Pedro Urbano tuvieron sin duda el puesto de su vida si no hubiesen tenido cupo. No era ni la una de la tarde cuando enfundaron el rifle con un cupo bien seleccionado, con un venado que se meterá en bronce y 3 bocas, dos de ellas 100% homologables y la otra andará muy cerca si no se mete, y donde no paraban de cumplir grandes macarenos y algunos venados impresionantes, como les pasó con un venado orazo de alrededor de 20 puntas que casi les arrolla justo antes de abandonar el puesto, lo que no hacía más que afirmar que lo vivido allí era algo excepcional. El comentario a Riquelme por parte de Antonio “popy” era claro -“vaya espectáculo, no solo de montería, sino el que vais dando echando la mancha. Impresionante”.

Al puesto nº 10 se lo comían literalmente los guarros. Es cierto que era difícil, ya que tenía el sol de cara y a la hora de encararse el rifle había sitios donde no veían nada, pero el puesto era buenísimo y no paraban de entrarle una y otra vez jabalíes, además de algunos venados, entre otros el venado que le entró al 9 que casi los arrolla. Al final el puesto cumplió y se divirtieron de lo lindo. 

El nº 11 del amigo mallorquín Pepe Alhama y Juan Jose López propició que se pasaran de cupo una vez que lo tenían completo con un bonito venado, dos bocas y una cochina. Pero el gran macareno estaba por llegar y el amigo Juan José no falló abatiéndolo de un tiro certero, cobrando así uno de los oros de la montería.

En el nº 12 Jose Manuel Rojo abatía uno de los venados de la montería. Un venado con una cuerna súper gruesa, abierta y bonita, que apuntará al más noble de los metales. Dos bonitas bocas y una cochina muy grande completarían este precioso cupo. 

En el 13, para los supersticiosos decirles que fue un puestazo.  Tiros, tiros, y más tiros en una mañana en la que Carlos Alcaraz y Ciriaco Rubio terminaron cobrando 2 venados de buen porte, y que con seguridad se meterán en metal, jugando además muchísimos lances a jabalíes, completando su cupo como es debido.

El 14 fue quizás el puesto más difícil de la montería, pero encumbró a Nacho Comin, que dio fe de su buen hacer montero cerrando el cupo con un bonito venado y 3 preciosas bocas de categoría. En este puesto cualquier escopeta regular le hubiese costado hacer el cupo, pero el montero dio un recital.

En el 15 José Carlos Sanchez, muy bien acompañado por Ruben Montés, Autor de “La Última Luna”, en un bonito puesto sobre un peñón cobró un venado homologable precioso y 3 jabalíes, cerrando el cupo con facilidad y quedando inmortalizados para la posteridad en un nuevo proyecto del creador cinegético que pronto verá la luz.

En el 16 estuvo el hijo de Juan de la Cierva, un puesto que le cedió su padre y que era el puesto menos bueno de la montería. Allí jugaron varios lances a venados y jabalíes, y cumplieron en él, cerraron así un plantel inolvidable para organizadores, monteros y para todos los allí presentes.

Un plantel en el que se vio algo que nos estamos acostumbrados a ver: A medida que iban llegando al cortijo para la comida, los monteros se fundían en un abrazo con el organizador dándole la enhorabuena, y no fueron pocos los que afirmaban haber estado en la montería de su vida.

Un plantel de lujo arrojaba con 15 puestos la friolera de 61 Jabalíes con 33 bocas de categoría (+del 50%) con más de 20 homologaciones, y 21 venados, con 12 metales. El sueño de cualquier organizador de monterías.

Las mejores organizaciones del panorama montero español han monteado esta finca emblemática en la cual hemos tenido la suerte y el privilegio de “Cumplir un Sueño”, por eso hay que agradecer principalmente a Gabriel Ruiz Garcia su confianza, su cariño y sobre todo su profesionalidad, y agradecer también a la propiedad, a postores, cargadores… y a todo el que de una manera u otra arrimó el hombro para que La Jutia fuera un festival.

Agradecer como no el recital que se dio en el monte por parte de las rehalas y guías, cantándole las reses una y otra vez a los puestos y sacando a los grandes macarenos una y otra vez de los encames…

Y lo mejor de todo es que aunque jamás olvidemos lo vivido allí, Rubén Del Sol se encargó junto a su equipo de que todos ustedes puedan vivirlo y disfruten de esta maravillosa montería con vuestros propios ojos, pues muy pronto podremos ver el documental en el que podréis compartir este sueño con todos nosotros.

Fte.: Jesús Riquelme

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